viajaron dos seres paralelos,
Y en aquel punto de intersección,
sucumbieron y se abrazaron
en memoria de lo cierto.
Y lo cierto es que un abrazo,
vale mas que todas las palabras
agotadas en la oscuridad,
escondidas tras los muros,
tras los edificios,
mascan el recuerdo
de lo sublime.
la extensa razón
de asfixiarte,
le guiña a la terrible indiferencia
de las olas que despellejan rocas,
desveladas en el inmortal deseo
desde este rayo solar,